La energía de diciembre es la culminación de un ciclo que ha despertado grandes, grandes olvidos. Que latían sin ser vistos en vuestro mundo. En vuestra sociedad.

Se han removido, y más se removerán, durante el 2020.

Un año lleno de mitos, de profecías.

Un número, 2020 que os infunde temor, no sabéis que va a pasar.

Mucho se especula, mucho se seguirá especulando.

Y lo que debéis saber, es que no hay nada escrito, amados.

Mucho puede cambiar todo aún.

La humanidad tiene mucha voluntad, se confía en vuestra evolución, en vuestro despertar.

En el poder de vuestros actos, en el poder de vuestra consciencia.

Confianza, es la palabra.

Permitiros ser libres para soñar sin miedos.

¿Qué es lo que queréis para el 2020?

Vuestros sueños son los tejedores de las futuras realidades que se están manifestando aquí ahora. Con vuestros pensamientos en este instante.

¿Queréis un futuro de paz?

¿Queréis caos?

¿Qué queréis?

Ha llegado el momento de tomar la decisión.

Es un momento de poner orden, simbólico. A todo lo que lleváis arrastrando tiempo atrás.

Ahora ha llegado el momento, de la culminación de todos vuestros deseos dormidos.

Es el momento de sacarlos a la luz.

Momento de reflexiones y decisiones.

Decisiones

Cierre de año, cierre de ciclo.

Cierre.

Es necesario que comprendáis que tenéis mucho lastre que soltar, y la tierra también.

Debéis entender que la vida que os sostiene, no es otra que la que vuestra amada Gaia os brinda.

Sin ella no podríais tener una esencia humana como la que tenéis.

Su energía, su naturaleza es la que os sustenta con su aliento de vida.

Tenéis que entender que todo el daño que está sufriendo la tierra, es el mismo daño que os estáis proporcionando a vosotros mismos, sin ser conscientes de ello.

Igual que ocurre con vuestra realidad diaria.

¿No os habéis fijado en la forma en la que le habláis a los demás? Es la misma forma en la que os tratáis a vosotros mismos.

Las palabras con las que tan duramente juzgáis al prójimo, son las mismas con las que con la misma dureza os juzgáis a vosotros mismos.

El amor que le proporcionáis a los demás, es el que os permitís hacía para vosotros.

La comprensión, la ayuda… todo lo que le proporcionáis al prójimo, es lo que os estáis proporcionando a vosotros mismos.

Y es triste. Es triste ver como unos seres tan hermosos, y evolucionados en consciencia como vosotros. Malgastan su energía y su potencial en proyectar solo egoísmo, miedo, ira…

¡Hay tanto amor dispuesto para vosotros!

Lo único que tenéis que hacer es tomarlo entre vuestros brazos. Y dejad que os inunde, os empape.

Dejad que ese amor sustituya al miedo, al odio.

Dejad que ese amor transforme vuestra vida.

Transforme vuestro mundo. ¡Transforme todo!

Está ahí, en el mismo lugar donde está el miedo.

Párate a pensar, que quieres en cada momento.

Que pensamiento elijes.

Que acciones van a definirte.

Párate y piensa

¿Es eso lo que quieres?

¿Es realmente eso lo que quieres?

Recuerda que tienes amor, ilimitado.

Un amor tan puro como el de una madre. Más intenso aún. Más profundo.

Y está disponible para ti las 24 horas, los 365 días de tu año. Solo para ti.

Y hay suficiente.

Suficiente para colmar los corazones de cada habitante de esta tierra.

Y para el resto de seres que viven en este inmenso y profundo cosmos.

Sed conscientes del momento en el que vivís.

¡De lo que sois!

No dejéis que el piloto automático de vuestra mente os controle.

Vuestra vida, es demasiado preciada para que malgastéis los días sin ser conscientes del momento que vivís.

No malgastéis ni un segundo.

Permitiros el gozo de estar conscientes en este hermoso mundo, y aprended a disfrutar de sus maravillas.

Soltad el drama, soltad el victimismo.

¡Sois las victimas de vuestra propia realidad, creada por vosotros mismos!

¡Nadie tiene la culpa de lo que te pasa! ¡Solo tú!

¡El victimismo no existe, solo tú lo creaste, para no afrontar las realidades que te resultaban dolorosas!

¡Qué fácil es culpar a otro de los errores y fallos que no quieres afrontar!

Olvida todo eso, y empieza de cero.

Que este 2020 te brinde todo aquello con lo que soñaste.

Y que la dicha colme de gozo tu corazón

Te bendigo hermosa alma